Hoy en día muchas empresas y pymes me preguntan por opciones de financiamiento sin recurrir a créditos o préstamos bancarios. En España no sólo estamos viviendo una dura crisis económica, sino una aún más dura crisis financiera. Lo que se traduce en la casi ausencia de crédito bancario accesible para las pymes. Desde el 2008 las empresas españolas está viendo como nuestros bancos reducen el nivel de préstamos y créditos, porque según ellos "nadie nos pide financiación". Pero lo que es cierto, es que cualquier empresa en España tiene que buscar otras vías de financiamiento ajenas al préstamo bancario. Ante esta ausencia de crédito, muchas pymes españolas han tenido que cerrar. Pero si tu empresa se encuentra en una situación similar, tienes que saber que existen otras opciones para poder seguir funcionando. Por lo que te propongo seguir estos tres consejos:
- Dedicarse a la actividad principal: porque ante una situación de ausencia de crédito bancario o de préstamos en condiciones difíciles de asumir, lo mejor es centrarse en lo que mejor sabemos hacer. Esto a veces supone eliminar nuevas líneas de negocio emprendidas durante las fases de boom económico, o incluso cerrar sucursales o establecimientos. Sea como sea, tienes que hacerte fuerte en un segmento o nicho de mercado que conozcas muy bien y sobre todo que puedas satisfacer y defender mejor que la competencia. Para ello te recomiendo que leas mi artículo sobre cómo vender más.
- Recortar gastos: es sin duda la acción más habitual en este tipo de situaciones de problemas de financiamiento bancario. Pero recuerda que es una medida limitada, porque siempre habrá unos gastos mínimos, y además puede afectar al nivel de calidad percibido por el cliente. Así que si vas a recortar gastos, piensa en cómo afectará a tu producto o servicio. Porque lo más importante es mantener al cliente fiel a nuestro negocio y pagando el precio más alto posible. A veces simplemente basta con aplicar estos consejos de finanzas para emprendedores.
- Evitar los impagos de clientes: no sólo porque así se tendrá una mayor liquidez y no habrá que recurrir a créditos y préstamos bancarios. Sino porque cualquier banco verá con mejores ojos financiar a una empresa con un nivel muy bajo de impagados. Al fin y al cabo los cobros del negocio son los que permiten devolver la financiación bancaria. Ante un impagado, como con tantas cosas en la vida, lo mejor es la prevención. Es decir, antes de dar crédito a un cliente estudia su histórico de pagos con otros proveedores, la solvencia, y en su caso las operaciones que ha realizado con él. Es importante que esta labor la realice personal ajena al área comercial. Porque a veces los vendedores no son muy estrictos con las condiciones de pago, simplemente porque buscan cerrar más fácilmente la venta. Si el impago ya se ha producido, lo mejor es tener fijado un procedimiento cordial de reclamación por si se hubiera producido algún error. Pero si tu cliente te va diciendo que ya te pagará o no te responde, será mejor que vayas preparando la vía judicial para tu reclamación, porque de lo contrario seguramente nunca cobres.
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